Más de 200 jóvenes comenzaron a vivir Recreo, la primera Escuela de Innovación Social del Biobío
Instancia desarrollada por Actitud Lab y organizada por el Comité de Desarrollo Productivo Regional que busca acercar a estudiantes de 14 a 18 años a una experiencia de trabajo colaborativo.
Para dar comienzo a la actividad estuvo presente el Intendente (s) de la región, Enrique Inostroza, quien destacó que “esto es parte de lo queremos para el Biobío, cuando el año pasado los consejeros regionales aprobaron la Estrategia Regional de Desarrollo, uno de los componentes tiene que ver con la innovación. Recreo no es solamente buscar un espacio que permita que los jóvenes en época de vacaciones puedan tener una distracción, sino que también fomente la cultura emprendedora”.
La idea de traer Recreo a regiones surge en el marco de la Estrategia Regional de Innovación, dentro del programa de fortalecimiento del ecosistema emprendedor que contempla diversas actividades con estudiantes de enseñanza media con el objetivo de instalar competencias de innovación y emprendimiento social en los jóvenes. Eric Forcael, Subdirector del Comité de Desarrollo Productivo de la región, explicó que hacer innovación social consiste en “desarrollar soluciones innovadoras pero para problemas ciudadanos. En Recreo, los jóvenes pensarán en problemas que tenga nuestra ciudad, trabajarán sobre esos problemas y buscarán las soluciones”.
Sebastián Errázuriz, Director Ejecutivo de Actitud Lab, organismo detrás de Recreo, se refirió a cómo esperan que Recreo impacte en los niños que participan en ella. “Buscamos empoderar a los jóvenes para que vuelvan a creer en ellos, nosotros no creemos que sean el futuro, ellos son el presente. Creemos profundamente en su potencial y creemos que hoy la sociedad los tiene relegados, nosotros queremos llevarlos a la primera línea”, sostuvo.
Recreo comenzó con más de 200 participantes y se espera que durante la semana más jóvenes puedan acercarse a la experiencia. Génesis Domínguez del Liceo Obispo San Miguel de Chiguayante contó que “me enteré por un evento en Facebook y quise venir porque se veía súper entretenido. Se puede sociabilizar con la gente y además es un buen proyecto porque se ven las realidades que hay en el país”. Otra de las participantes, Camila Villanueva, estudiante del colegio Madres Dominicas, explicó que “nos irán apoyando para durante la semana crear un prototipo como solución a nuestro problema y el último día presentarlo en una feria de emprendimiento donde nos acompañarán nuestros padres y que además, será abierta al público”.